Claves para gestionar un e-commerce

Ingresar en el mundo del e-commerce o comercio electrónico requiere una planificación adecuada, agilidad en la ejecución de un plan de acción y dinamismo en su desarrollo.

Vender durante las 24 horas es el sueño de muchos, pero puede resultar una pesadilla.

Inicialmente, para poder planificar hay que considerar la realidad concreta de la empresa.

Esto tiene que ver en principio con los objetivos de negocio, su historia y etapa de desarrollo. También es necesario tener en cuenta la potencialidad del e-commerce.

En la misma dirección, no se puede dejar de lado el contexto cultural del mercado en el cual pretende incursionar el comercio electrónico, así como la competencia, los factores diferenciales para competir y los canales de comercialización disponibles.

Con la guía inicial de un plan de acción, se debe realizar la gestión propia del e-commerce.

Algunos de estos procesos consisten en tareas de catalogación de productos, actualización de precios, nivel de stock e información de productos en diferentes sistemas,entre otros.

Como vemos, la gestión de un e-commerce involucra tareas de diferente índole, algunas más administrativas y otras más operativas. Dependiendo del volumen del negocio y otras características de la operación, pueden ser ejecutadas por una o diferentes personas.

El dinamismo es algo que caracteriza al e-commerce y es necesario que se replanteen de manera permanente y periódica todos los aspectos de una propuesta de valor, buscando encontrar nuevas opciones para brindar a los clientes.