Conmovedor: no pudo recibir juguetes de niño y sus hijos lo sorprendieron

La conmovedora historia de Mario Llanos, un hombre que vivió una infancia marcada por la pobreza, resuena en la voz de su hijo, el locutor de Cadena 3 y La Popu Ulises Llanos. 

Ulises contó en Viva la Radio cómo, tras preguntarle a su padre sobre su único juguete de la niñez, le reveló la dura realidad de su infancia: "Él no sabía lo que era un juguete. Nunca estuvo Papá Noel, nunca estuvieron los Reyes Magos. Vivían de prestado en el campo y en un lugar donde habían cosas en desuso encontró un camión de caucho y fue su primer juguete".

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"Esa historia a mí me marcó mucho, me imaginé a ese niño de seis años encontrando por primera vez un juguete", expresó Ulises, quien también indagó sobre la infancia de su madre, Nelly, que sí recibió regalos en Navidad.

La búsqueda del camión de Mario se convirtió entonces en una misión familiar. Ulises relata: "Empezó un trabajo, en ese momento, de encontrar ese camioncito". Después de una larga búsqueda, Ulises encontró un juguete similar en lo que él llama el "Hospital de los Juguetes", en barrio General Paz de Córdoba, donde un hombre mayor tenía el camión a la venta. Además, también consiguió una muñeca para su madre.

Fue así que en una emotiva Nochebuena Ulises y su familia lograron regalarle a Mario, después de sesenta años, el camión que había encontrado en su infancia. "Le llegó a ese niño, que pasó por mucho, por una vez, por una noche, pudo vivir la magia de la Navidad", expresó Ulises, visiblemente emocionado.

La familia Llanos, compuesta por cinco hermanos, celebró este momento como un regalo que trasciende el tiempo. "Don Mario, Doña Nelly, la vida los ha premiado", finalizó el relato, dejando un mensaje de esperanza y amor familiar en esta temporada navideña.

Además, contó que para darle los regalos les prepararon una "carta" que Papá Noel les preparó a ambos:

Queridos Mario y Nelly,

Hoy quiero hablarles a ustedes, pero también a los niños que alguna vez fueron. A esos pequeños que guardaron sueños, ilusiones, y que, a pesar de las dificultades, supieron encontrar la belleza en los momentos más simples.

Mario, sé que tu infancia estuvo marcada por pobreza y desafíos. Que creciste en una casa prestada en el campo, y que muchas veces no tuviste lo que otros niños daban por sentado. Pero también sé que un día, entre las cosas que otros consideraron basura, encontraste un juguete. Ese juguete, aunque humilde, fue para vos un tesoro, un compañero que te regaló instantes de alegría en medio de tantas carencias.

Hoy quiero regalarte algo muy especial, algo que no es solo un juguete, sino un puente hacia ese recuerdo. Quiero que, al tenerlo en tus manos, vuelvas por un instante a ese niño que jugaba con esperanza, que veía magia donde otros solo veían dificultades. Porque ese niño siempre mereció más, y hoy quiero que sientas que esa magia nunca te abandonó.

Nelly, esta Navidad también es para vos. Quiero regalarte algo que no es solo un juguete, sino una puerta hacia los sueños y la ilusión que alguna vez llenaron tu corazón de niña. Espero que al recibirlo te sientas transportada a esos momentos llenos de esperanza y dulzura, porque siempre mereciste cada instante de alegría.

Hoy, Mario y Nelly, esta Navidad es un homenaje a ustedes, a sus historias, a los niños que llevaron dentro y que nunca fueron olvidados. La magia que quizás faltó en esos años está aquí ahora, para recordarnos que el amor, la esperanza y los sueños nunca dejan de existir.

Con todo mi cariño,

Papá Noel

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